Arcano XXIII
Desierto
Ángeles púrpuras desgarran el cielo,
un grito gigante se pierde a lo lejos.
Hadas de bruma cubren
tu semblante sereno.
Silencioso pasa el tiempo por tu arena,
implacables los años por tu geografía.
Secretos milenarios oculta tu seca piel
y aun carente de vida, siento tu palpitar.
Oh alma gigante,
cuyo grito hasta el cielo ha de escuchar
guardas silentes secretos
y en tus ojos años de soledad.
Ángeles de arena sucumben
silenciosos ante el frío del anochecer,
se siente poderosa tu afonía y tu saber.
Una suave caricia en tu piel, una brisa de soledad.
Siento áspero tu rostro gigante terracota,
guardián de tierra, de arena muda.
Hay soledad en tus entrañas, pero aun persistes
al tiempo, oh desierto